martes, 9 de septiembre de 2008

MI DESCARGA

Paseante:"¿Es la Fulanita?"

Paseanta:"Sí","¿Entonces que tal agosto?","¿Todo en el sofá?"

Paseante:"Pues si antes estaba como una vacaburra, ahora será dos vacasburras"

Paseanta:"Eres un idiota, ¿ves?, ya le has hecho llorar"

Paseante:"Seguro que lo hace sólo por comerse las lágrimas"

Por debajo de mi ventana además de tuneros y esos chiquillos de 14 años que esconden el hachís en la papelera del parque, pasan especímenes de todo tipo y por la noche cuando no hay un alma por la calle, se escuchan conversaciones de todo tipo. Pero hoy no os voy a hablar de "¿quién le pinchó la moto al Charly porque se había enrollao con la Vane?", aunque todos nos imaginamos que fué algún tipo llamado Rulas, Richar o Tete o Nene o Nano o algo así. Voy a hablar de la pretemporada.

Pretemporada es una de esas palabras capaces de acobardar a cualquiera. De esas que te retuercen el ánimo y te hacen tener pesadillas en la siesta( el peor momento para tener pesadillas), aunque también hace ilusión volver a ver a mis apestosos compañeros( vaale después de entrenar yo también soy apestoso). La pretemporada es esa fase del año en que los entrenamientos están destinados a adquirir el fondo físico con el que afrontar el resto del año y a adquirir una capacidad sobrehumana para soportar el dolor. Ya llevo una semana y al contrario de lo que esperaba, me encuentro fresco como una lechuga. Como quien dice, porque después de pegarte 12km corriendo por caminos de chinarrillo y con rampas del 10% en tramos largos e incluso una pared casi vertical al final de la primera mitad, no te sientes muy fresco. Eso sí, la sensación de haberte dejado la piel es increíble. Ayer lo dí casi todo( siempre hay que guardarse un poquito, para seguir vivo más que nada), llevé un ritmo entre el grupo de los elegidos (RT,M y el chaval nuevo) y el grupo de J, el Míster y LT, en la primera mitad, la más dura. Y la verdad es que estaba bastante cómodo, pero tras parar en la "Cruz del Susio" para estirar un momento, y reengancharme con el ritmo del segundo grupo, sufrí una pequeña pájara de la que me recuperé casi al final del recorrido, que no evitó que acabase con el segundo grupo. Estaba orgulloso de ser el segundo delantero en terminar el recorrido, siendo LT el primero, es como ser el primero de los mortales. Después estiramientos, abdominales, flexiones y a casita a poner algo de líquido en el cuerpo. Pero ahí no acabó todo, tardé media hora( medida por el reloj de Rogelio) en encontrar un sitio para aparcar, dichosas ferias.

Es una pena sentirme tan bien físicamente en el año que no voy a poder rendir al 100%. Lo cierto es que antes de Julio estaba muy fuerte físicamente, porque cuando acababa de estudiar, tenía tanta tensión acumulada que sucumbí a uno de esos antros llamados gimnasios. El primer día el tipo del gimnasio al verme dijo "Uff, vas a tener que hacer primero un poco de cardio, porque no tienes pinta de haber hecho mucho deporte en mucho tiempo", pobre iluso, desconocía mi sobresaliente en cardio( este perdonádmelo, estoy de exámenes). Y como el idiota de él no se creía que jugaba en el equipo de rugby de la universidad, perdió el dinero de la matrícula en una apuesta estúpida, que consistía en correr durante media hora a los ritmos que él me fuese marcando. Tenía que haber apostado más. Ya me había pasado antes. En el colegio me hicieron repetir mi prueba de resistencia porque pensaban que había hecho trampa, porque un niño de 1,55 y 65 kg no podía hacer el "Course Navette" mejor que un larguirucho futbolero. No sólo lo repetí, sino que mejoré mi marca, chúpate esa "Bombi". Cuando hacía Judo, lo hacía en una categoría de peso en que la gente era mayor que yo porque estaba bastante más gordo que los de mi edad y pensaban que por ser un crío gordito lo tenían hecho, pobres ilusos. Siempre he pensado que la forma física tiene mucho que ver con la mentalidad. Si cada vez que salgo a correr no pienso en descargarme hasta que se me quiebren las piernas, ¿para qué salgo a correr?. Si voy a hacer pesas necesito superarme cada día, y quiero que cuando salga al campo, se vea reflejado el trabajo. Pero este año, sólo se verá reflejado en el Trofeo Rector y quizás, si estoy en forma y cojo ritmo de juego, en el CEU.

Tras leer a Iñako Díaz Guerra, me he preguntado quienes eran para mí la trinidad de los infravalorados, y prometo que próximamente haré un post sobre ello. Mientras tanto, en las cuadrículas he puesto tres canciones nuevas, para quien quiera torturarme un poco a base de críticas ácidas y corrosivas.

3 comentarios:

carmncitta dijo...

yo estoy en pretemporada cerebral, que el lunes empiezo clases y hay que esta preparados xD

Lucano dijo...

Y yo, en pretemporada de vacaciones, que es cuando uno piensa en cómo aprovechar los trece o catorce días resultantes de sumar fines de semana, festivos, libranzas de guardia... ¡Ánimo con los entrenamientos! Y ya nos contarás por dónde cae la "Cruz del Susio".

Marga. dijo...

Vaya tela eh?? uf, me recuerdas al resto de los mortales. Se nota que te gusta piedrahita.

Bueno, vamos a ver. Con respecto a tu examen y las ferias te diré que aunque no hubiese examen, tal vez otro lo tendría, o tal vez lloviese tanto, que no podrías ir a ninguna feria. O tal vez estarías con fiebre, después de correr mil km.

Lo importante es lo de no sentirse mal, no sentirse solo. Te va a pasar y me va a pasar. pelillos a la mar!!!!